Crítica de Addio del passato

Olivia Nieto Yusta

SELITEN@T-UNED

En 2011 Julio Bravo, crítico y periodista especializado en artes escénicas, dio el paso y escribió una obra dramática, Oficina de patentes, que se estrenó en Microteatro por Dinero bajo la dirección de Juan Carlos Pérez de la Fuente. Tras el éxito de esta pequeña pieza Julio Bravo decidió continuar su incursión teatral. En 2016 ganó el VIII Premio Internacional de Teatro para Autores Noveles Agustín González por Alianzas y ese mismo año nació Addio del passato, estrenada en mayo de 2016 en La Pensión de las Pulgas de Madrid con un gran éxito de crítica y público. Ahora se produce el gran salto al Teatro Fernán Gómez que la tendrá en escena los meses de abril y mayo de 2017. La obra tiene por protagonista a una reconocida cantante de ópera, Margarita Gauthier. Tras estrenar con gran éxito La Traviata de Verdi la soprano conoce a Armando Duval, un joven del que se enamora apasionadamente. Sin embargo su relación se verá amenazada por la enfermedad que sufre la cantante a la que apenas le quedan unos pocos meses de vida. El título de la obra, Addio del passato, procede del libreto que Francesco Maria Piave compuso para La Traviata, estrenada en 1853 en el teatro de La Fenice de Venecia. Este libreto se inspiró, a su vez, en La dama de las camelias (1848) de Alejandro Dumas. La directora del montaje, Blanca Oteyza, ha destacado del libreto de F. Maria Pave su capacidad para ensalzar el carácter trágico y apasionado de la obra: “Nuestra función toma el título del aria Addio del passato, que canta Violetta en el último acto, y que es una de las más bellas y melancólicas de la literatura operística para soprano; en ella, la protagonista de «La traviata», a punto de morir, se lamenta de su vida descarriada y llena de excesos, así como de su amor perdido”. A la hora de realizar su versión, Julio Bravo ha trasladado la acción a los años sesenta del siglo XX, una época que comienza a imbuirse en una modernidad floreciente, y en concreto al glamuroso mundo de la ópera. Tras su estreno en el circuito alternativo donde se contó con una sala de pequeñas dimensiones, la compañía se ha tenido que enfrentar a un espacio diferente y con más posibilidades (el Fernán Gómez) que les ha permitido transmitir la grandilocuencia y elegancia del mundo de la ópera. Algunos fragmentos de Verdi se han añadido al montaje para potenciar los sentimientos de esta historia apasionada. La puesta en escena es sobria, a caballo entre lo teatral y lo cinematográfico, con un magnífico vestuario diseñado por Pier Paolo Álvaro en colaboración con el artista plástico Enrique González. La escenografía ha corrido a cargo de Roger Portal consistente en cuatro grandes biombos que van rotando para enmarcar los distintos actos. A todo ello se suma un reparto integrado por Lola Baldrich, Rebeca Matellán, Noemí Rodríguez, Orencio Ortega, Fran Calvo, José Emilio Vera y Ruth Rubio, un elenco que enriquece este montaje en el que se retratan, en clave operística, las pasiones humanas.

Olivia Nieto Yusta, SELITEN@T