COMEDIA BIEN INSPIRADA

Crítica de A gustico

Candela Caballero Torres

Prácticas, Máster de Teatro y Artes Escénicas UCM

Desde que Carolina Touceda se inició en la dramaturgia, ha ido construyendo una seña de identidad a través de la denuncia social con toques humorísticos gracias a su compañero Álex Ortín. A gustico ya fue seleccionada en 2020 por el Certamen Shakespeare to Woman que se vio paralizado por la pandemia. En marzo de 2022 al fin se estrena con todas las localidades agotadas siendo reprogramada en la Sala Usina este abril. Nos encontramos ante una obra con una inspiración en Como gustéis de William Shakespeare muy inteligente, escrita por esta polifacética artista y el dramaturgo Álex Ortín. Para empezar, se nos presenta un contraste entre los personajes, siendo unos exageradamente caricaturizados, con respecto a otros poco arquetípicos, como Rosalinda u Orlando; esta elección funciona para crear el código humorístico de personajes antagónicos pero carismáticos propios de este género. Por tanto, se destaca el trabajo actoral que, además, abarca múltiples interpretaciones en un mismo actor o actriz, así como sus presencias en escena. Se puede señalar, sin embargo, a la actriz Moni Villar que a pesar de tener personajes carismáticos, la dicción a la largo de toda la pieza no es muy clara perdiendo a veces el contenido textual.

La puesta escenográfica está muy centrada, contando con un sofá, una mesa y tres troncos que salen y entran de escena en función del espacio representado. A gustico se estructura en dos partes marcadas por la geolocalización: Madrid y un bosque de la Patagonia argentina. Es el motivo de la deportación de Rosalinda, argentina afincada en España, que produce este cambio de ámbitos y nos introduce de la forma más natural un gran discurso social de los muchos que se lucra la obra: el abuso de poder, las dificultades de la inmigración, las influencias de las redes sociales y el ecologismo. Todo esto arma un discurso de pérdida y reconstrucción sobre uno/a mismo/a que hacen honor a su título.

A gustico se compone de una concatenación de escenas muy bien sostenidas por un texto ligero y rítmico que decaen con transiciones silenciosas que van a oscuro. A parte, se le suman ciertos fallos técnicos o de elección técnica, que hace que el envoltorio de la pieza pierda cierta profesionalidad salvada, con suma, por su contenido.

Touceda y Ortín no pierden la esencia del clásico de Shakespeare manteniendo sus características que contraponen la gran ciudad con la naturaleza, los personajes travestidos o la cuestión del amor, además de hacer algún guiño textual.

Por tanto se destaca la buena construcción de discursos sociales muy bien atados en este gracias al género cómico.

[7/10]